En algunos casos, su proveedor de telefonía móvil puede ser considerado parcialmente responsable si actuó con negligencia al proteger su cuenta. Si un atacante logró realizar un intercambio de SIM haciéndose pasar por usted y la compañía no aplicó los protocolos de seguridad adecuados (como la verificación con PIN o contraseña), podría ser responsable según ciertas leyes de protección al consumidor o por negligencia.
Grandes compañías telefónicas han enfrentado demandas en el pasado por ataques de intercambio de SIM, especialmente cuando no implementaron medidas de seguridad reforzadas. Los tribunales han determinado que las compañías telefónicas tienen la obligación de proteger las cuentas de los clientes, y no prevenir accesos no autorizados —incluso con riesgos conocidos— puede constituir negligencia grave.
Sin embargo, la responsabilidad depende de los hechos específicos de su caso. Debe demostrarse que la compañía tenía conocimiento del riesgo y no tomó medidas razonables para evitarlo. Las víctimas a menudo pueden presentar quejas ante organismos reguladores como la FCC o agencias estatales de protección al consumidor, y pueden tener derecho a una compensación mediante una demanda civil.
Si su número fue secuestrado y utilizado para cometer fraude, consulte con un abogado especializado en casos de intercambio de SIM y robo de identidad. Contar con representación legal puede ayudarle a demostrar la negligencia del proveedor y a buscar justicia y compensación económica.