La Ley de Ventas a Domicilio de California (HSSA) es una ley estatal que protege a los consumidores de las tácticas de venta bajo presión que suelen utilizarse en las ventas a domicilio, incluidas las de paneles solares. Esta ley se aplica a cualquier venta realizada en el domicilio del consumidor o fuera del establecimiento comercial del vendedor, lo que la hace especialmente relevante para el sector de los paneles solares, donde muchas empresas recurren a la venta puerta a puerta para llegar a los propietarios de viviendas. La HSSA permite a los consumidores anular los contratos en un plazo de tres días hábiles o de cinco días si se es mayor de 65 años, lo que supone una salvaguardia vital contra las decisiones precipitadas tomadas bajo la presión de tácticas de venta agresivas.
Un aspecto clave de la HSSA es el requisito de que los vendedores notifiquen claramente por escrito el derecho del consumidor a rescindir el contrato. En el contexto de la venta de paneles solares, esto significa que cualquier empresa que haga ofertas puerta a puerta debe informar al propietario de que puede cancelar el acuerdo en el plazo de tres o cinco días sin penalización alguna.